miércoles, 7 de marzo de 2012

2 comentarios:

Julián dijo...

Cuando uno escucha discos como The Wall tiene la sensación de que lo único que queda por hacer es mirar al cielo y volver.
No hay más allá a a donde ir.
Lo mismo pasa con Sgt. Pepper's, con Tommy, con Exile On Main Street, Use Your Illusion o Nevermind.
Agotan un camino.
The Wall es un disco que yo escuchaba con devoción con apenas 12 años. Podría caer en la vanidad de decir que eso habla bien de mí y de mi sensibilidad musical. Pero no, creo que simplemente habla muy bien del disco, sobre todo si pensamos que por ese tiempo yo era un fan absoluto del heavy metal y el punk.
En eso que se dio en llamar ópera rock, rock conceptual, cuesta encontrar una obra tan perfecta y profunda como esta concebida a finales de los 70 por esa alma torturada que es Roger Waters, y en donde la alienación y la soledad de la vida moderna son el eje que estructura todo el relato de la vida de su protagonista, Pink.
Me alegra enormemente saber que en pocos días estaré frente al creador de todos estos temas que han significado tanto para mí a lo largo del tiempo.

Julián dijo...

Gilmour, para variar, siempre ingeniándoselas para sonar épico.